SOCIALIZACIÓN EN LA INFANCIA TEMPRANA 3- 6 AÑOS
Socialización: La socialización es un proceso de influencia entre una persona y sus semejantes, es desarrollo que resulta de aceptar las pautas de comportamiento social y adaptarse a ellas. Es decir, es el proceso a través el cual niños-niñas adquieren el conocimiento, las habilidades y las destrezas, que le permiten actuar como miembro de un grupo. (Molina, 2008, p.4).
Desarrollo Social en la Escuela
Relaciones con los Pares y Amigos
Las relaciones con los pares son cruciales en la infancia temprana. Los amigos proporcionan un sentido de pertenencia y apoyo emocional, lo que es vital para el bienestar psicológico de los niños. A través de las interacciones con sus iguales, los niños desarrollan empatía, aprenden a reconocer y respetar las emociones ajenas, y practican la resolución de problemas. Estos vínculos también fomentan la autoestima y la confianza en sí mismos.
Consecuencias de la Falta de Socialización
La ausencia de socialización en la infancia temprana puede tener consecuencias negativas a largo plazo. Los niños que no desarrollan habilidades sociales adecuadas pueden tener dificultades para establecer relaciones saludables en el futuro. Además, la falta de socialización puede aumentar el riesgo de problemas emocionales y de comportamiento, como la ansiedad y la depresión. En casos extremos, la carencia de habilidades sociales puede llevar al aislamiento social y aumentar la vulnerabilidad al bullying.
El Fenómeno del Bullying
El bullying es un problema grave que puede surgir como consecuencia de la falta de habilidades sociales. Los niños que no saben cómo interactuar de manera efectiva con sus pares pueden convertirse en víctimas o perpetradores de bullying. Los niños que son aislados o rechazados por sus compañeros son más propensos a ser intimidados, lo que puede afectar gravemente su autoestima y salud mental. Por otro lado, los niños que no han aprendido a manejar sus emociones pueden recurrir al bullying como una forma de expresar su frustración o inseguridad.
CONCLUSIÓN REFLEXIVA
La socialización en la infancia temprana es un componente esencial para el desarrollo integral de los niños. A través de las interacciones en la escuela y con sus pares, los niños aprenden habilidades vitales que les servirán a lo largo de su vida. Es fundamental que los padres, educadores y la sociedad en general fomenten y apoyen oportunidades para que los niños socialicen de manera positiva. La inversión en el desarrollo social de los niños no solo promueve su bienestar inmediato, sino que también contribuye a formar individuos empáticos y resilientes que serán capaces de construir relaciones saludables y enfrentar desafíos sociales en el futuro. En la vida diaria, reconocer la importancia de estas primeras interacciones puede ayudar a prevenir problemas como el bullying y promover un ambiente más armonioso y comprensivo para todos.
REFERENCIAS
- Denham, S. A. (1998). Desarrollo emocional en niños pequeños. Guilford Press.
- Gazelle, H., & Ladd, G. W. (2003). Soledad ansiosa y exclusión entre pares: Un modelo de diátesis-estrés de las trayectorias de internalización en la infancia. Desarrollo Infantil, 74(1), 257-278.
- Hartup, W. W. (1992). Relaciones sociales y su significado en el desarrollo. Psicólogo Americano, 44(2), 120-126.
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